Uno de los medios para generar empoderamiento femenino es a través de la autonomía económica. Para ello es necesario contar con mejores condiciones laborales: mayores ingresos, reducir las jornadas largas y políticas de flexibilidad que permitan el balance vida personal-trabajo, que les permitan acceder, permanecer y crecer en empleos de calidad para generar ingresos propios y suficientes.
Sin embargo, lamentablemente aún hay escasos empleos que tengan estas características, también cada vez hay más mujeres que se cuestionan la satisfacción de su vida, como conformarse con ser ama de casa, empleada, entre otras cuestiones o que ven una necesidad del mercado que aún no está cubierta, por lo que en las últimas décadas ha incrementado el emprendimiento femenino.
La independencia económica o también llamada libertad financiera, entendida como aquella autonomía económica que se logra cuando se puede generar ingresos para cubrir necesidades, no es fácil lograrla en el emprendimiento pues en nuestra cultura no se desarrollan habilidades y capacidades en la población para crear empresas, pero la ventaja de las últimas generaciones de mujeres mexicanas, es que tenemos un gran impulso y agallas de hacer las cosas diferente.
Algo importante y esencial es aprovechar y desarrollar las capacidades que tienes, por lo tanto hay que pensar en las fortalezas creativas que puedas tener y aunarlas con las ideas.
Antes de compartirte los seis consejos, yo Lu Delgadillo te pido que primero y antes de iniciar un emprendimiento ¡CREAS EN TI! por favor.
Este es el principal motor, te lo digo por propia experiencia, ya que si dudas de ti misma, a la primera de cambio hay muchas posibilidades que quieras abandonar el barco.
Ahora sí, si realmente deseas emprender, conforme mi experiencia y capacitaciones, te aconsejo tener en cuenta lo siguiente:
Emprende desde tu pasión, desde lo que eres buena, lo que te sale muy bien y además disfrutas hacer, ojo no necesariamente está relacionado a lo hayas estudiado, si es tu caso, sino más bien a lo que tu sabes que amas hacer, eso que llegas a pensar lo haría sin cobrar, obvio que vas a cobrar, pero ese pensamiento es común y así te será más fácil identificarlo.
Estudia, investiga, especialízate en el tema. Ya qué estás segura de que es eso que amas hacer, es muy importante que te capacites, esto nunca lo dejarás de hacer, pues cada vez te encontrarás con nuevos retos que serán necesarios estudiar, investigar, especializarte, etc.
Escoge un nicho de mercado específico. A grosso modo, se refiere a quién le vas a vender -esto es de lo más complicado pero tranquila poco a poco, recuerda que todo lleva su proceso- te recomiendo iniciar con acotar de lo general y a una particularidad, por ejemplo ¿le vas a vender a mujeres u hombres?, ya que definiste este primer punto ahora ¿qué características tienen? esas mujeres o esos hombres a los que les vas a vender.
Haz una prueba de mercado pequeña. Esta prueba debe ser la mínima viable, esto significa que no tengas que invertirle ni mucho dinero, ni esfuerzo, capacitación, etc. O sea, sí vas a ocupar esto (dinero, tiempo, investigación, etc.) pero al grado que tu consideres que si por algo no funciona, no perdiste mucho.
Regresa a redefinir. Si después de tu primera prueba, sí funcionó algo, seguramente tendrás que cambiar cosas o mejorar otras, etc, aquí también implica volver a definir aún más tu nicho, conforme la información que encontraste en esta prueba.
Ten una ventaja competitiva de tu producto o servicio. Esto se refiere a ¿qué diferente ofreces en comparación con la competencia?, sí siempre tendremos competencia, aunque cuando estamos iniciando creemos que no, te digo que sí, pero esto no es para desanimarte sino todo lo contrario, encontrar ese diferenciador, es lo que generará que atraigas a las personas que coinciden contigo y los valores que quieres transmitir desde tu persona hasta tu marca.
Y por favor, nunca olvides ¡CREER EN TI!, a pesar de los altibajos, no pierdas la esperanza en ti y en tu emprendimiento.
Tener algún emprendimiento no debe ser un salto al vacío, sino un plan elaborado, no significa que puedas hacer lo que quieras, al contrario, es dedicarle tiempo, esfuerzo y trabajo al proyecto, y sí en un principio no las hará tener ganancias millonarias, pero sí te podrá dar más confianza, seguridad propia, satisfacción, innovación, nuevas habilidades y lo mejor es puede ser la opción de realizar lo que siempre has querido y te aseguro que tu perspectiva de la vida cambia.
Si quieres platicar directo conmigo, requieres más recomendaciones, consejos y te puedo apoyar en este camino, con mucho gusto lo haré.
De corazón,
Lu
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